5 de abril de 2015

Interblogueando

Un solo tema, dos puntos de vista:

PAREJAS


El punto de vista de @Pelvica



Unidos por culpas no son pareja, son compañeros de celda.

  ~ Leandro Taub (@LeandroTaub) marzo 28, 2015



Una pareja son dos piernas que tienen cada una dirección propia, y aún así, intentan no enredarse, tropezarse o caerse para poder caminar hacia algún lugar, existente o imaginado, al que probablemente no tendría sentido ir saltando en un solo pie. El camino así es evidentemente más difícil de transitar, pero una vez comenzado el trayecto, no hay vuelta atrás. Volver atrás es aprender a caminar otra vez con una sola pierna, rehabilitación emocional y psicosocial mediante.

El camino pareciera estar siempre lleno de obstáculos, más o menos salvables:
  • miradas deseadas o indeseadas que ven con la vista y no con el resto de los sentidos.
  • imposición de lógicas ajenas a las partes y a lo ilógico de decidirse a amar.
  • falta de lubricante existencial que facilite la yuxtaposición de dos percepciones únicas.
  • envidias, emulaciones e intentos de sustitución de identidades amatorias.
  • malinterpretaciones de lo que es amor y de lo que es hasta que la muerte los separe. La muerte de qué, ¿la propia, la del amor, la de la pasión, la de la muerte misma?
  • la soledad puede resultar más atractiva que mil candidat@s a compartir la cama y la vida.
  • el camino pasado puede llegar a pesar más que el presente y puede volverse una competencia imposible.
  • un comentario al azar en el peor momento en el peor lugar posible puede ser como una flecha que llegue a un blanco tardío pero indefenso.
  • ya no podemos volver a ser lo que una vez fuimos, pero tampoco seguir intentando convertirnos en aquello que soñamos juntos.
  • por contradicciones recurrentes entre la camisa y el pantalón.
  • por falta de equipamiento necesario para soportar el constante cambio climático.
  • por falta de higiene, mantenimiento y oxigenación.
  • por falta de espacio, de fe, de razones o de motivaciones.

Caminar dos sobre una sola pierna es un acto de coordinación, concentración, relajación y resistencia.

Si estar en pareja es crear un camino compartido, dejar de estarlo es destruirlo.

Destruir incluso los pasos que dejaron huella para se olvide de ellos hasta el tiempo.

Volver a la encrucijada en la que se alejan las pisadas que ya no se cruzarán, caminar de a uno, sin saber cómo se ha llegado hasta ahí, ni cómo o para donde seguir.

¿Por qué no seguir caminando sol@s y ahorrarnos los cambios de dirección, de calzado, de ruta?

Nos obligaron a nacer, sabiendo que íbamos a morir…


¿Cómo no obligarnos a andar de a dos, aún sabiendo que nuestro camino tiene final, para hacer de cuenta que nos cuesta menos recorrerlo?





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